Siempre me sentí atraída por las Matryoshkas,
esas muñequitas de madera
tradicionales rusas
(ruso: Матрёшка
/mʌˈtrʲoʂkə/)
creadas en 1890,
cuya originalidad consiste en que se encuentran huecas por dentro,
de
tal manera que en su interior albergan una nueva muñeca,
y ésta a su vez
a otra, y ésta a su vez otra,
en un número variable que puede ir
desde
cinco hasta el número que se desee,
siempre y cuando sea un número impar.
Otra de mis incógnitas siempre fué como llamarlas:
matrioska, matroesjka, matryoshka,
matrioshka, matreschka, babuschka,
mamuschka, matrjoschka,
viene de matrona = "madre"
ó en el caso de
babushka, baboeska , de abuela.
El término correcto es Matryoshka
o en español Matrioska
Las hay de todo tipo y materiales pero las que mas llamaron
mi atención son las creadas en tela por Emily Moss de Ravenhill.
Será seguramente porque reúnen muchas cosas que adoro,
las telas, el bordado, el patchwork y la pintura.
En ellas me inspiré para pintarlas,
como siempre intentando hacerlo de una manera diferente.
Esta es mi versión de las Matryoshkas
I ♥ Matryoshkas
pintadas con acuarelas
Brotes de ternura